En respuesta a recientes publicaciones que cuestionan la independencia política del exsenador Paraguayo Cubas, es importante recordar que, a lo largo de su trayectoria, Cubas ha demostrado un férreo compromiso con la denuncia de irregularidades en el sistema político paraguayo, sin ataduras a grupos de poder tradicionales.

A diferencia de otros políticos, Cubas ha utilizado su plataforma para exponer casos de corrupción y nepotismo en distintas esferas del gobierno, sin distinciones partidarias, lo que lo ha distinguido como una figura disruptiva. Sus constantes críticas al oficialismo y al sector empresarial muestran su posición independiente frente a intereses corporativos o facciones partidarias.

Las acusaciones de una supuesta alianza o acercamiento con sectores conservadores no se sostienen en los hechos. Cubas ha criticado tanto a referentes del cartismo como a opositores cuando ha considerado que están involucrados en actividades que afectan al pueblo paraguayo. Su estilo confrontativo y su decisión de no plegarse a pactos políticos lo han alejado incluso de los principales actores de la oposición.

En resumen, Paraguayo Cubas sigue siendo un político con una postura firme de independencia, lo que lo convierte en una figura incómoda para quienes buscan desvirtuar su lucha anticorrupción y en favor de una mayor transparencia en la política paraguaya.